Carlos Saura nació en Huesca en 1932. Tras realizar el documental Cuenca (1958) debutó como director de ficción con Los golfos (1960). Cinco años más tarde rodaría uno de los títulos más emblemáticos del cine español, La Caza, que recibió el premio al mejor director en el Festival de Berlín. A partir de entonces, inició su colaboración con el productor Elías Querejeta, quien propició la etapa más fructífera de su carrera gracias a títulos como Peppermint frappé (1967); El jardín de las delicias (1970); Ana y los lobos (1972), La prima Angélica (1973), Cría cuervos (1975) o Mamá cumple cien años (1979).
La música irrumpe en la carrera de Saura cuando el productor Emiliano Piedra le propone llevar al cine la versión de Bodas de sangre de Antonio Gades. La película acabaría formando parte de una trilogía completada con los films Carmen (1983) y El amor brujo (1986). Tras la excelente acogida de su película Ay Carmela (1989), Saura retomaría el cine musical con los documentales Sevillanas (1992) y Flamenco (1995).