Cristóbal Gabarrón nació en la pequeña localidad de Mula, Murcia, en 1945. Sus padres eran gente humilde que realizaban todo tipo de trabajos. Gabarrón decidió pronto que quería dedicarse a la pintura: “Un día iba caminando con mi madre por Mula y encontré un calendario antiguo verdaderamente horroroso. Recuerdo que la imagen, que estaba rasgada, representaba una mujer con una guitarra. Fue mi primer contacto con la pintura y el color. Recogí aquel papel del suelo y lo guardé durante años. Entonces es cuando supe que yo quería hacer esas cosas”.
En 1964 realiza sus primeras exposiciones individuales, en la Galería Castilla de Valladolid y en la Galería Macarrón de Madrid, compuestas por pinturas figurativas en las que representaba paisajes castellanos. En 1967, con tan sólo 22 años, Gabarrón expone en las dos capitales que marcarían el devenir del arte moderno a lo largo del siglo XXI: Nueva York (Galería Leob) y París (Galería Arts Perspective). Aunque en un primer momento se decantaría por el hiperrealismo Gabarrón optará finalmente por un estilo propio, más cercano en sus inicios al Informalismo, que lo alejará de los movimientos artísticos predominantes en la época.
Polifacético artista (pintor, escultor, grabador, muralista, etc) Gabarrón ha sabido sacar su obra a las calles a través de sus creaciones publicas para encontrarse con la gente en los espacios públicos.
A partir de los años setenta su prestigio irá incrementándose hasta llegar a estar considerado en la actualidad, por la crítica internacional, como uno de los creadores más representativos de las últimas generaciones de artistas españoles.