“Cuando no quede un árbol, / cuando todo sea asfalto y asfixia o malpaís, / terreno pedregoso sin vida, / esta será de nuevo la capital de la muerte”. Una muerte que sorprendió el pasado domingo al autor de este verso, el poeta, narrador, ensayista y traductor mexicano José Emilio Pacheco. Premio Cervantes y Reina Sofía de la Poesía Iberoamericana, Pacheco fue autor de una poesía que hablaba de la belleza de lo cotidiano y, sobre todo, del tiempo.
Tan sólo unos días después de que recordáramos con un post la grandeza de su compañero literario (y vecino del barrio de la Condesa) Juan Gelman, fallecido también la semana pasada, incluimos a continuación un artículo de la revista Minerva que recoge el encuentro que el autor de Morirás lejos mantuvo con alumnos de secundaria en el CBA y un audio que recoge la charla en la que Pacheco participó junto a sus lectores, dentro de la XIV Lectura Continuada de El Quijote.
Encuentro con José Emilio Pacheco
Dos grandes de las letras se han ido, pero nunca morirán, han dejado un gran legado para todos nosotros.
Higorca