Desde mayo de 1952, fecha en que se creó la revista Positif, hubo entre sus colaboradores el deseo de explorar cinematografías poco transitadas, como aquellas consolidadas en Lejano Oriente, pero durante los años cincuenta apenas llegaron a Europa obras de Mizoguchi, Kurosawa y Ozu. A lo largo de la siguiente década varios redactores viajaron a festivales donde pudieron descubrir películas de Oshima, S. Ray e Imamura. Ya en los años setenta pudieron acercarse a aquellas dirigidas por King Hu o Lino Brocka y a obras anteriores de Naruse, R. Ghatak y G. Dutt. Fue a partir de los años ochenta cuando se pudieron ver con mayor frecuencia y continuidad, tanto en festivales como en salas de cine, obras procedentes de la India, China, Taiwan y Corea del Sur. Así es como se siguieron con asiduidad las propuestas de Hou Hsia-hsien o Edward Yang y más adelante Kitano, Im Kwon-taek y Wong Kar-wai, entre muchos. Hoy día, por suerte, también llegan atractivas propuestas narrativas películas procedentes de países como Mongolia o Tailandia.

Este ciclo de cinco películas ofrece la posibilidad de descubrir o de volver a ver películas realizadas desde 2010 por Hirokazu Koreeda, Ann Hui, Lee Chang-dong, Jia Zhangke y Hong Sang-soo. En cada una de ellas se puede apreciar un tempo, una estructura, una sensibilidad y una capacidad para expresar emociones que nos transmiten la muya grata convicción de que el cine siempre puede ser reinventado.

Floreal Peleato, Corresponsal de Positif en España.